Longitud: 3,6 km (ida y vuelta)
Tiempo de recorrido: 1,5 a 2 horas
Intensidad: Difícil
Cotas de altura: Desde 1.370 a 1.550 msnm
Relato del sendero:
El sendero al Cráter Navidad es una caminata corta pero impresionante, ideal para quienes buscan conocer de cerca el poder geológico que dio forma al paisaje andino. Este recorrido lleva directamente hasta el cráter formado durante la erupción del Volcán Lonquimay en la Navidad de 1988, una de las más documentadas del siglo XX en Chile.
El punto de partida está en el sector alto de la reserva, cerca del centro de esquí Corralco, desde donde se inicia una caminata por terreno volcánico, con cenizas, escoria suelta y pendientes suaves a moderadas. Aquí no hay bosques ni sombra: el ambiente es árido, abierto y dominado por colores rojizos, grises y negros. La sensación de estar en otro planeta es inmediata.
El ascenso es constante, pero no demasiado exigente. A lo largo del trayecto, es posible ver cómo la vegetación lucha por establecerse en un suelo joven y mineralizado. Entre las rocas volcánicas aparecen líquenes, algunos pastos andinos y, en primavera, pequeñas flores que desafían el viento de altura.
Al llegar al borde del cráter, se revela una escena sobrecogedora: una gran depresión en la ladera del volcán, con paredes irregulares, capas de lava solidificada y un silencio imponente. Desde este punto también se tienen vistas espectaculares del Volcán Lonquimay, la Sierra del Colorado, el Valle de Malalcahuello y otros cordones montañosos de la región.
Aunque no se desciende al interior del cráter por motivos de seguridad y conservación, el borde es lo suficientemente cercano para apreciar su magnitud. Además, este punto alto se convierte en un excelente mirador para la fotografía y la contemplación.
El regreso es por el mismo camino, con precaución en las bajadas por material suelto. En total, el sendero se puede recorrer tranquilamente en menos de dos horas, siendo una excelente opción para quienes buscan una caminata corta pero muy significativa en contenido natural y geológico.
Cráter Navidad es el sendero perfecto para sentir el pulso volcánico de la zona, caminar sobre historia reciente y comprender cómo el fuego de la tierra moldea el paisaje que hoy admiramos. Ideal para senderistas curiosos y amantes de la geología.
